martes, 7 de abril de 2009

QUE DICE LA BIBLIA ACERCA DE LA MUSICA..

Hola Dios los bendiga a todos, mi nombre es Robert Palacios Coordinador del equipo de Alabanza de Mision Cristiana Elim en la ciudad de Zacatecoluca.

Con el objetivo de brindar informacion acerca de la musica, formarnos, entablar interrelaciones y brindar ayudas como: letras de cantos, acordes, consejos etc. Hemos creado este blog esperando que seamos de mucha bendicion para sus vidas y que juntos logremos llegar a darle a Dios la albanza y adoracion que el espera de nosotros. En esta primera presentacion quiero exponerles un articulo que me parecio muy interesante escrito Guillermo Mitchell acerca de "Que dice la Biblia acerca de la Musica".

  1. La música en el Antiguo Testamento

A través del largo período histórico que abarca la Biblia, se encuentran muchas referencias a la música en la vida de sus pueblos y culturas. La música tenía lugar en casi todas las actividades de la vida del pueblo de Israel.

La más antigua referencia a la música se encuentra en la lista de los descendientes de Caín en el libro de Génesis:

Adá dio a luz a Jabal, de quien descienden los que viven en tiendas de campaña y crían ganado. Jabal tuvo un hermano Jubal, de quien descienden todos los que tocan el arpa y la flauta. (4.20-21,)

Algunos cantos antiguos se relacionan con eventos específicos tales como la victoria sobre los enemigos (Ex 15.1-18; Jue 5.1-31) o el ritual junto a un pozo (Nm 21.17-18). Otras referencias sugieren música vigorosa acompañada de movimiento físico —instrumentos musicales, canto y danza:

Entonces la profetisa María, hermana de Aarón, tomó una pandereta, y todas las mujeres la siguieron, bailando y tocando panderetas, mientras ella les cantaba:

«Canten en honor al Señor,
que tuvo un triunfo maravilloso
al hundir en el mar caballos y jinetes.»
(Ex 15.20-21)

En otros libros del Antiguo Testamento se puede ver claramente que la música también ocupaba su lugar en una amplia variedad de contextos. Las trompetas resonaron durante la toma de Jericó (Jos 6). La música ayudaba a evocar los estados de éxtasis o el estado mental propicio para profetizar (2 R 3.15). Desde su juventud David es caracterizado como músico; entre otras cosas él podía tranquilizar el ánimo atormentado del rey Saúl (1 S 16.14-23). Luego de haber derrotado a Goliat, el pueblo festejó el evento con canto y danza:

Aconteció que cuando volvían ellos, cuando David volvió de matar al filisteo, salieron las mujeres de todas las ciudades de Israel cantando y danzando, para recibir al rey Saúl, con panderos, con cánticos de alegría y con instrumentos de música. Y cantaban las mujeres que danzaban, y decían: Saúl hirió a sus miles, Y David a sus diez miles. (1 S 18.6-7)

Tiempo después, cuando David rescató el arca de la alianza y la llevó triunfante de vuelta a Jerusalén todos celebraron con gran entusiasmo:

Mientras tanto, David y todos los israelitas iban delante de Dios cantando y danzando con todas sus fuerzas, al son de la música de arpas, salterios, panderos, castañuelas y platillos. (2 S 6.5)

La música y la danza estaban presentes en las celebraciones, tanto grandes como pequeñas, que marcaban los eventos importantes en la vida del pueblo. En las labores del campo los trabajadores cantaban para mantener el ritmo de su trabajo y completar a tiempo los deberes del día. Sin embargo, conforme Israel evolucionó de ser una sociedad tribal, nómada y pastoril hasta convertirse en una cultura urbana, la música cambió y se volvió más compleja e institucionalizada.

Esto es observable en el desarrollo del culto en Jerusalén. Cuando el arca fue instalada en Jerusalén un cuerpo oficial de músicos y cantantes entrenados se estableció para dirigir la adoración (1 Cr 16.4-7, 39-42).

La música jugó un papel vital en la adoración en el templo de Jerusalén; en especial, los salmos ocupaban un lugar muy importante. Las frases que encabezan muchos salmos tales como «Salmo de Asaf» o «de los hijos de Coré» los relacionan con ciertos gremios de músicos, mientras que otros encabezados tales como «al líder: con instrumentos de cuerdas de acuerdo con el Seminit» pueden indicar cierta melodía en particular.

Algunos títulos indican que el salmo es de un tipo particular tal como «de lamento». De hecho, el análisis de los salmos en sus diferentes «géneros» constituye un estudio importante en sí mismo.Peregrinar a los lugares sagrados era una actividad común entre los israelitas. A lo largo del trayecto ellos cantaban cantos propios al tema de su peregrinación, tales como los «cánticos de las subidas» —Salmos 120 al 134 que exaltaban la oportunidad de «subir» a Jerusalén y adorar en el templo de Jerusalén, en Sión. Estos cantos estaban asociados probablemente con las tres grandes festividades agrícolas (Ex 23.17; Dt 16.16). Sin duda era muy impactante para el israelita común participar en la peregrinación y la adoración en el templo.

Además era un evento con gran atractivo estético e importancia simbólica; por ejemplo, las trompetas representaban la autoridad de Dios, su majestad y poder.En algunos libros como Amós se indica que la música fue volviéndose más formal; músicos «profesionales» fueron contratados para formar coros y orquestas que servían en los diversos templos y lugares sagrados, y en el palacio.

No obstante, la alta calidad de los músicos no representó necesariamente que la música fuera aceptada por Dios. Durante la visita de Amós a Betel, él predicó en contra de la injusticia en esa sociedad y la vaciedad del culto en el templo de allí. El mensaje de Dios a los adorantes fue:

Odio y desprecio las fiestas religiosas
que ustedes celebran;
me disgustan sus reuniones solemnes.
¡Alejen de mí el ruido de sus cantos!
¡No quiero oír el sonido de sus arpas!
(Am 5.21, 23)

La sinagoga como institución parece haber comenzado durante el período de la cautividad en Babilonia. La palabra en sí significa «lugar de asamblea», y no implicaba necesariamente un edificio o lugar concreto —eso se dio más tarde, a mediados del siglo III a.C. El culto de la sinagoga fue adaptado del estilo del culto del templo, pero organizado y conducido por personas laicas, no herederos de la línea sacerdotal. Los servicios incluían lecturas de la Ley y los Profetas, Salmos, enseñanza, oración y la bendición final.

2. La música en el Nuevo Testamento

La destrucción del templo de Jerusalén en el año 70 d.C. provocó que los judíos desarrollaran nuevas formas de expresión musical. Para entonces ya se habían impuesto restricciones sobre el uso público de música y danza en la celebración del sábado. Como resultado del poder y la cultura grecorromana aumentaron aun más las restricciones. Sólo en Lucas 7.32 y en Mateo 11.7 se menciona específicamente el uso de la flauta y danza en el Nuevo Testamento, y el pasaje en Lucas lo menciona en el contexto de los juegos infantiles.

La música en la sinagoga cumplía una función de ayuda emocional y como instrumento en la enseñanza para el mantenimiento de la fe judía y el estilo de vida. Los coros del templo ya no existían y la música instrumental estaba prohibida en la sinagoga. Los salmos, las oraciones y las lecturas eran entonados en forma recitativa, es decir, se recitaban en un tono alto semejante a una letanía. El texto era cantado en una sola nota, con variaciones melódicas simples que indicaban la estructura gramatical. Probablemente los primeros cristianos adaptaron a su propio culto lo que ya conocían de la música en la sinagoga, en la forma de salmos, himnos y cantos espirituales, cantando y alabando al Señor (Ef 5.19).

El servicio del culto de la sinagoga, tanto el canto de himnos como el canto coral, contribuyó al sentimiento emocional comunitario necesario para la edificación del nuevo movimiento cristiano. Muchos de los primeros cristianos solían congregarse en la sinagoga local y debían estar familiarizados con esa forma de culto. Ellos sabían los mismos himnos y fueron agregando nuevos cantos que reflejaban su nueva fe en Jesús.

Las palabras de algunos himnos primitivos aparecen en el Nuevo Testamento. La narración de la natividad que aparece en el Evangelio de Lucas incluye el canto de María, el canto de Zacarías y el canto de Simeón. Las palabras de otros himnos cristianos primitivos se mencionan en algunas epístolas del Nuevo Testamento (Flp 1.5-11, 1 Ti 3.16, 1 P 3.18-22). Encontramos otros fragmentos de himnos en Apocalipsis 4.1; 5.9-10, y los cantos de victoria y confianza en Apocalipsis 7.15-17; 11.17-18.

A medida que la Iglesia crecía y el evangelio se extendía en otras culturas, se introdujeron otras influencias musicales. Sin embargo, hubo oposición contra la música instrumental y la danza, porque eran asociadas con las religiones paganas, los espectáculos del coliseo romano, la vida disipada y la inmoralidad. En los siglos subsecuentes los cristianos no sólo han desarrollado formas musicales propias y de expresión distintiva, sino también han aprovechado las tradiciones musicales de muchas culturas. A través de las generaciones sucesivas los cristianos han discutido sobre los tipos de música y expresiones musicales apropiadas para el contexto de la palabra de Dios y el culto a Dios. Sin embrago sabemos que una de las maneras mas faciles encontrar la expresion apropiada de alabanza y adoracion a Dios es lo que tuvieron muchos de los musicos registrados en la biblia y relacion con Dios lo que los movia a inspirarse y crear adoracion a Dios.

Posteriormente estaremos hablando de otros temas, esperando que podamos ser de bendicon para todos aquellos que estan en el ministerio de la musica. que dios les bendiga en todo lo que emprendan.

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pasionps77@hotmail.com